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Mostrando entradas de 2013

Juan Ramón Jiménez, "Criatura afortunada"

Cantando vas, riendo por el agua, por el aire silbando vas, riendo, en ronda azul y oro, plata y verde, dichoso de pasar y repasar entre el rojo primer brotar de abril, ¡forma distinta, de instantáneas igualdades de luz, vida, color, con nosotros, orillas inflamadas! ¡Qué alegre eres tú, ser, con qué alegría universal eterna! ¡Rompes feliz el ondear del aire, bogas contrario el ondular del agua! ¿No tienes que comer ni que dormir? ¿Toda la primavera es tu lugar? ¿Lo verde todo, lo azul todo, lo floreciente todo es tuyo? ¡No hay temor en tu gloria; tu destino es volver, volver, volver, en ronda plata y verde, azul y oro, por una eternidad de eternidades! Nos das la mano, en un momento de afinidad posible, de amor súbito, de concesión radiante; y, a tu contacto cálido, en loca vibración de carne y alma, nos encendemos de armonía, nos olvidamos, nuevos, de lo mismo, lucimos, un instante, alegres de oro. ¡Parece que también va

Dune, de Alejandro Jodorowsky

Dune: La película de Alejandro Jodorowsky que no veremos.  La historia del cine esta plagada de proyectos de películas frustradas y filmes inacabados, de importantes directores y productores, que pudieron ser grandes películas. La adaptación a la pantalla de la novela de ciencia-ficción  Dune  de Frank Herbert que a principios de los 70 proyectó el director, escritor, pensador, guionista de cómics, actor, mimo y experto en magia y ocultismo franco-chileno Alejandro Jodorowsky es uno de los proyectos de películas no realizadas del que mas se ha escrito y comentado entre la crítica, los amantes del cine, y los seguidores del género fantástico. Pudo ser, si no una gran película, al menos un trabajo cinematográfico completamente singular por la impronta que estaba dispuesto a darle un personaje tan peculiar como Jodorowsky, además que contaba con un cheque en blanco del multimillonario Jean-Paul Gibon para grabar la película, y por la extraordinaria nómina de colaboradores técnicos que

Pablo III y los absurdos de la religión

  “Se me reprocha que de vez en cuando  me entretenga con Tasso, Dante y Ariosto.  Pero ¿es que no saben que su lectura  es el delicioso brebaje que me ayuda  a digerir la grosera sustancia  de los estúpidos doctores de la Iglesia?  ¿Es que no saben que esos poetas  me proporcionan brillantes colores,  con ayuda de los cuales soporto  los absurdos de la religión?”. Alejandro Farnesio, Pablo III   (Papa entre 1534-1549,  declaración hecha en 1545)

Vida, de Ángel Boligán

Sade petrarquista

Carta del marqués de Sade a su esposa Renèe durante su encierro en el castillo de Vincennes. La Laura del sueño es Laura de Noves o de Sade, musa de Petrarca y antepasada del marqués: 'Mi único consuelo aquí es Petrarca. Lo leo con deleite, con una pasión sin igual ¡Qué bien escrito está el libro! Laura me da vueltas en la cabeza. Soy como un niño. Leo todo el día sobre ella y sueño con ella toda la noche. Escucha lo que soñé anoche con ella, mientras el mundo seguía ajeno a mí. Era más o menos medianoche. Acababa de quedarme dormido con la vida de Petrarca en la mano. De repente se me apareció. ¡La vi! El horror de la tumba no había deslucido su belleza, y sus ojos despedían el mismo fuego que cuando Petrarca los alabó. Iba vestida de crespón negro, con su hermosa cabellera rubia suelta con despreocupación. «¿Por qué os quejáis en la tierra? — me preguntó. Venid conmigo. No hay males, no hay dolor, no hay problemas en la vasta extensión que yo habito. Tened el valor de segui

Tierra firme de la fantasía, de Rafael Gonzalo Verdugo

Si tenemos en cuenta las escasas publicaciones originales dedicadas al aforismo y su poco menos que inexistente difusión, este libro de Rafael Gonzalo supone todo un descubrimiento para los amantes de este puntilloso género, donde profundidad de pensamiento y poesía se mezclan con gran equilibrio.  A lo largo de una obra al mismo tiempo tan densa y ligera como ésta, podemos disfrutar de afilados y brevísimos análisis acerca de la democracia y la sociedad del bienestar (considerada por nuestro autor como mero fascismo de entretenimiento), los estudios históricos (que a veces se dirían histéricos), la práctica y la teoría del arte, la ciencia, el lenguaje y una gran variedad de temas principales que aparecen revisados con una expresión de corte metafórico unas veces, conceptual otras, pero siempre sorprendente : “El arte es la verdad de la ficción que nos permite superar la ficción de la verdad” ; “Cuando damos limosnas repartimos la pobreza, no la riqueza” ; “Los enfermos me

El fantasma de la democracia

Durante la transición española se fue conformando una sociedad espectral, en el sentido de que se instauraba una democracia representativa, de simulación y no la verdad de la democracia, que en todo caso sería de participación efectiva y con verdadera división de poderes. Se generó un nuevo simulacro, del mismo modo que se había simulado albergar una cierta dignidad durante la dictadura. Era una sociedad que aparentaba encontrarse en una posición para la que nada había hecho. Todo el mundo jugaba a la democracia, había que ser más democrático que los demócratas. Pero los espectros cambian de máscara, lo cual hacía sospechar que el derrumbe iba a instalarse tarde o temprano. La democracia vino formalmente como consecuencia de la caída de la dictadura, como deshecho de lo no hecho, porque la sociedad no había hecho nada por ser democrática, a no ser esperar a que el dictador se muriera de viejo. Después de toda esa alegría esperanzada, que no deja de ser religiosa, vino la depresión rea

No somos nadie

Para las televisiones somos cuota de pantalla, para la radio niveles de audiencia o share, cualquier espectáculo depende de la cantidad de público, para los políticos somos volumen de votantes, para el Estado un número de DNI, Hacienda nos controla a través del NIF y todos tenemos también un número de Seguridad Social; el mercado se nutre de masas de consumidores, las multinacionales hablan de volumen de clientes y todo se reconoce por cifras y siglas; existen en el mundo 824 millones de personas desnutridas, 630 millones de indigentes, 40 millones de infectados por el virus del SIDA, un millón de personas mueren cada año por accidentes de tráfico, otro millón por suicidio, mil millones no tienen acceso al agua potable... No somos nada, pero las cifras no duelen y ya sólo nos queda la contabilidad.

21 Mensajes de Alejandro Jodorowsky

21 MENSAJES PARA TRANSMITIR A CADA MIEMBRO DE LA SIGUIENTE GENERACION Alejandro Jodorowsky 1.-Eres un ser deseado. Estás aquí porque el Universo lo quiso. 2.-Siente que eres libre de ser lo que eres, no permitas que nada ni nadie te etiquete, ni te imponga guiones que no se corresponden con tu autenticidad. 3.-Cada ancestro de tu árbol es un don que hay dentro de ti para ser usado a tu favor y al de todo el Universo. 4.-Aprende a no pedir amor, simplemente ama. 5.-Cree en los pequeños milagros de cada día y atiende a las coincidencias, en ellas hay mensajes ocultos que te guían en el correcto camino. 6.-Cada día, haz un acto generoso con alguien cercano. 7.-Si en tu árbol genealógico hubo traumas, sánalos actuando. 8.-Déjate guiar por tu cuerpo, es sabio. Él te alertará de las situaciones de las que debas alejarte, sintiendo tensión y malestar. También te dirá cuando estás alineado con lo que eres, sintiendo relajación y bienestar. 9.-No contamines tu c

Ultimas palabras de escritores célebres antes de morir

Recojo del blog de curistoria esta lista de frases. Cuando uno es un genio en el uso de la lengua y la inventiva, ha de irse de esta vida con un último latigazo ocurrente, aunque no siempre se consigue, ya que muchos no pensaban que aquellas serían sus últimas palabras. Ahí va la lista. ·          Ahora me iré a dormir. Buenas noches  (Lord Byron) ·          ¡Que Dios ayude a mi pobre alma!  (Edgar Allan Poe) ·          Ten valor, Charlotte, ten valor  (Anne Brontë) ·          Alce, indio  (Incomprensible frase de Henry David Thoreau) ·          Incorpórame, quiero cagar  (Walt Whitman. Vive Dios que ningún hombre debería irse de este mundo con esa sensación en el cuerpo. Descargue primero y luego lléveselo Dios a su vera) ·          Pero los campesinos… ¿Cómo mueren los campesinos?  (Lev Tolstói) ·          Se disipa la niebla  (Emily Dickinson) ·          ¿No es meningitis?  (Louise May Alcott) ·          O se va él o me voy yo  (Oscar Wilde.