Ir al contenido principal

Imperios constructores vs Imperios explotadores

No todos los imperios son iguales. Por un lado, tenemos los imperios generadores y constructores (como el Imperio romano, el de Alejandro, el carolingio o el Imperio español) y, por otro, los imperios depredadores y explotadores (el Imperio colonial inglés, el francés, los imperios precolombinos o el nazi alemán).

El Imperio romano ha dejado (fuera de lo que ahora es Italia) 17 monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Todas construcciones excepcionales.

Inglaterra, fuera de sus fronteras, únicamente ha dejado cuatro: dos son prisiones (la cárcel en la que estuvo Mandela y el conjunto de las prisiones australianas), otra es una estación de tren en India, y la última un edificio civil (donde se declaró la independencia estadounidense). Ese es todo el legado monumental en el mundo de la época colonial inglesa.

El Imperio español levantó 50 monumentos Patrimonio de la Humanidad fuera de España.

No es lo mismo, ¿verdad?




Comentarios

Entradas populares de este blog

La verdadera historia de la cigarra y la hormiga, por Vicente Blasco Ibáñez

Reverbera en las blancas fachadas el sol de las primeras horas de la tarde. Procuramos, en nuestros paseos por la plaza de un pequeño pueblo valenciano, no salirnos de las islas de sombra que trazan los plátanos sobre la tierra rojiza y ardiente. Silencio de sueño, calma profunda de siesta veraniega. Los únicos que vivimos en este ambiente exuberante de luz somos mi amigo y yo, que conversamos bajo los árboles de la plaza, los niños que ganguean a gritos sus lecciones en la escuela próxima, siguiendo el venerable método morisco, y los enjambres de insectos que aletean, zumban y trepan en torno de los plátanos. Calla de pronto el coro escolar, y por las ventanas abiertas llega hasta nosotros la voz de un niño, el más aplicado tal vez, que recita una fábula: La cigarra y la hormiga . Como el griterío de una muchedumbre alborotada que contesta a ultrajantes alusiones, suena el chín-chín de numerosas cigarras moviendo sus cimbalillos entre las cortinas del follaje. Mi amigo el naturalista

Aforismos y escolios, de Nicolás Gómez Dávila

Nicolás Gómez Dávila nació y murió en Bogotá. Ha sido uno de los críticos más radicales de la modernidad. Alcanzó cierto reconocimiento sólo unos años antes de su fallecimiento , gracias a las traducciones alemanas de algunos de sus libro. Criticó todas las manifestaciones de la "modernidad", las ideologías marxistas, los principios básicos de la democracia y del liberalismo, por la decadencia y la corrupción que abrigan. Sus aforismos (a los que denominaba escolios ) están cargados de una ironía corrosiva, de inteligencia y de profundas paradojas. Ahí van algunos ejemplos. Genio y figura: Sobre modernidad y progreso La vida del moderno se mueve entre dos polos; negocio y coito. La palabra moderno ya no tiene prestigio automático sino entre tontos. El moderno llama cambio caminar más rápidamente por el mismo camino en la misma dirección. El mundo en los últimos trescientos años, no ha cambiado sino en ese sentido. La simple propuesta de un verdadero cambio escandaliza y ater

Dune, de Alejandro Jodorowsky

Dune: La película de Alejandro Jodorowsky que no veremos.  La historia del cine esta plagada de proyectos de películas frustradas y filmes inacabados, de importantes directores y productores, que pudieron ser grandes películas. La adaptación a la pantalla de la novela de ciencia-ficción  Dune  de Frank Herbert que a principios de los 70 proyectó el director, escritor, pensador, guionista de cómics, actor, mimo y experto en magia y ocultismo franco-chileno Alejandro Jodorowsky es uno de los proyectos de películas no realizadas del que mas se ha escrito y comentado entre la crítica, los amantes del cine, y los seguidores del género fantástico. Pudo ser, si no una gran película, al menos un trabajo cinematográfico completamente singular por la impronta que estaba dispuesto a darle un personaje tan peculiar como Jodorowsky, además que contaba con un cheque en blanco del multimillonario Jean-Paul Gibon para grabar la película, y por la extraordinaria nómina de colaboradores técnicos que