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Villanovarse o Mourir

El Barça juega lento, sin intensidad ni fondo físico, mucho me temo que se debe a la falta de entrenador. Esto puede servir para ganar a Osasuna o Granada, pero de cara al final de temporada es un problema grave. Cualquier equipo de nivel, bien organizado en defensa y que corra al contraataque le crea enormes problemas. Un córner del Barça es una ocasión para el rival. No sorprenden, es un equipo tediosamente predecible. Todavía siguen tocando en San Siro, todavía me duele el regate de Di María a Puyol. Y esto habla a favor de Guardiola. Guardiola sorprendía con cada alineación, no dejaba pasar una en cuanto a intensidad y compromiso con el equipo, con el estilo de juego que ha renovado el fútbol mundial. No se puede dirigir al mejor equipo del mundo por teléfono desde Nueva York. La presencia de Villanova en el Nou Camp frente al Milan, solución.




Y el Madrid se quita definitivamente un complejo que amenazaba con ser endémico frente al Barça, han recuperado la confianza en sí mismos. Por primera vez en mucho tiempo el Madrid ha sido claramente superior. Por lo tanto, de cara al año que viene ya no hacen falta “el puto amo de las ruedas de prensa” (en atinadísima definición de Guardiola) para sembrar cizaña, ni su alter ego en el campo, Pepe, para repartir tortas, además tienen a Varanne. Tampoco Coentrao porque no da el nivel. Como mínimo sobran tres lusos ilusos. Pero todo girará en torno a Cristiano, antiguo mister Portugal y nuevo Di Stéfano.

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