Gustavo Bueno es un filósofo de rompe y rasga. Sistemático, inteligente y visceral (el cerebro también es una víscera), radical, contrario al pensamiento débil o relativista y, como es ateo, argumenta como Dios. En una amplia entrevista en 'La Gaceta de los Negocios' , analiza la situación de la política española y ataca muchas de las instituciones y conceptos establecidos como indiscutibles por los memos del planeta: democracia, aborto, la imposición lingüística, nacionalismos, Baltasar Garzón... -Afirma que política y corrupción son inseparables en la democracia, porque el más refinado de los sistemas políticos es también el más vulnerable... -Hay que matizar, distingo entre corrupción delictiva y no delictiva. La primera afecta a funcionarios, políticos... y parece que no afecta al sistema porque son los individuos los que cometen las tropelías y la propia democracia tiene instrumentos para corregirlas a través de un juicio y los condena y los redime. Pero la corrupción no d...